Voluntarios de la Fundación ADMA, rescataron hace unos días a una perra abandonada en el Tajamar.
“Pocha“, como la bautizaron, estaba atada, sola y con un poco de alimento balanceado a su lado.
Después del aviso de los vecinos y un Policía, lograron sacarla del lugar. Hoy está castrada.
“Es cariñosa, juguetona, se lleva bien con otros animales y ama los mimos“, explicaron los voluntarios.